Londres Britannia Airportun, un aeropuerto en mitad del rió Támesis


El Támesis aparte de ser conocido por ser el rió de Londres, también lo es porque debido a las características de su cauce y profundidad, permite que sea navegable por lo que pueden atracar cualquier de embarcación. Este cauce se podría amplia en un futuro posibilitando la construcción de grandes infraestructuras, como las que comprende el futuro nuevo aeropuerto. 

Equipamiento aeroportuario que complementaria a su emblemático Heathrow, instalación que pese a ser remodelada, con motivos de los juegos olimpicos celebrados recientemente, es incapaz de absorver el intenso trafico aéreo que una gran ciudad como Londres tiene.

El nuevo Londres Britannia Airport diseñado por el estudio de arquitectura Gensler, contaría con cuatro pistas de aterrizaje flotantes, plataformas enormes apoyadas sobre pilotes regulados por un sistema hidráulico, que cumplirian una función estabilizadora de la estructura, absorbiendo la presión del fuerte oleaje que se genera en su caudal.

Los diferentes accesos de entrada y salida al recinto, se realizarían bajo el lecho del rió, estos túneles subterráneos, albergarían las conexiones por carretera y ferroviarias con la ciudad así como las redes ferroviarias europeas. Según la empresa, la flexibilidad inherente del diseño crea una plataforma por la cual las pistas pueden flotar, soportando la actividad aérea. El concepto permite una expansión futura para acomodar 6 pistas cuando sea necesario. 

La ubicación del aeropuerto flotante de río no sólo minimiza la perturbación de la contaminación acústica sobre las comunidades proximas, sino que también evita cualquier demolición de viviendas. Suponiendo un impacto mínimo sobre la fauna de peces, aves y otros animales que viven actualmente en el estuario.

El proyecto se completa con un plan, que contempla la construcción de 200.000 viviendas, en los terrenos del antiguo aeropuerto de Heathrow. Proponen el reciclaje de los terrenos y edificios en una ciudad ecológica  que pueden utilizar la infraestructura existente para proporcionar viviendas adicionales a una población de trescientas mil personas.

Para finalizar cabe destacar que las instalaciones del aeropuerto, ha diseñado para generar gran parte de su propia energía a partir de turbinas marinas situadas en el interior, y al lado de las pistas de aterrizaje flotantes, suponiendo un coste energético cero para el consorcio creado por la administración publica y en el que también participaría capital privado.